Cada detalle de este incomparable departamento fue diseñado por las decoradoras Kathy Grimberg y Simone Mandel.
Una sala de doble altura con parlantes grandes de alta calidad pero imperceptibles. Un escritorio que con un clic del sistema automatizado se convierte en un cine premium con sonido inmersivo. Un dormitorio con una TV que se acomoda a la posición del usuario y sonido multicanal.